La miopía es actualmente una verdadera emergencia de salud pública, con tasas de prevalencia en constante aumento en todo el mundo y con marcadas diferencias entre un continente y otro, entre un país y otro, y entre distintos contextos socioeconómicos y culturales.
Tendencias de crecimiento
Los países con mayor número de miopes son China, Japón, Singapur, Taiwán y todos los Países del sudeste asiáticodonde en las zonas urbanas hay 90% de niños y adolescentes con miopía al final del bachillerato, de los cuales 10% tienen miopía alta.
En todo el mundo, el crecimiento de las tasas de prevalencia de la miopía se aceleró en el periodo del Pandemia de COVID-19cuando los niños y adolescentes se vieron obligados a hacer un uso masivo de los dispositivos digitales y a vivir predominantemente en interiores, con muy poco tiempo al aire libre.
Las estimaciones más recientes prevén que el número de miopes en el 2050 más de 740 millones, considerando sólo a los niños y adolescentes.
Las causas
La miopía surge en la primera infancia debido a un alargamiento excesivo del globo ocular, tiende a empeorar a medida que los individuos pasan de la infancia a la adolescencia y, en algunos casos, progresa hasta la edad adulta y puede convertirse en miopía patológica.
La miopía es, con diferencia, el defecto refractivo más común en el mundo. Es una afección con etiología multifactorialdiferencias biológicas relacionadas con el sexo, el género, la etnia y el entorno socioeconómico.
Su aparición y progresión son en realidad el resultado de una mezcla de factores genéticos, epigenéticos, ambientales y hormonales. I niños en edad escolar suelen ser más susceptibles y vulnerables a los factores ambientales que los adultos, y esta condición es especialmente significativa en la niños en edad preescolarque aún se encuentran en un período crítico de desarrollo del aparato visual, caracterizado por una gran plasticidad.
Riesgos a largo plazo
Prevenir y controlar la miopía en la edad pediátrica significa, en primer lugar, garantizar una mejora de la calidad de visión para toda la vida futura y, además, constituye una forma de prevención contra otras enfermedades oculares a los que el ojo miope está más expuesto que el ojo emétrope, como el glaucoma, la maculopatía miópica y el desprendimiento de retina.
Estas patologías se presentan con mayor frecuencia en la edad adulta y en la vejez, especialmente en individuos con miopía alta, es decir, una miopía que alcanza o supera las 6 dioptrías.
Lentes de contacto y longitud del bulbo
¿Se puede hacer algo para contrarrestar la progresión de la miopía? La respuesta es sí, y una posibilidad es ralentizar el alargamiento del globo ocularespecialmente en los primeros años de aparición del defecto refractivo, lo que significa reducir significativamente el riesgo de progresión a miopía alta y, en consecuencia, prevenir algunas enfermedades oculares muy incapacitantes.
Hace unos 20 años, los estudios en ortoqueratología, la técnica oftalmológica destinada a corregir los defectos visuales sin recurrir a la cirugía, comprobaron que se podía ralentizar el alargamiento ocular, y hace unos 15 años, la investigación clínica demostró que la lentes de contactoLAC multifocales especialmente blandos.
¿Cuál es el mecanismo de acción que se aprovecha? De hecho, se crean perfiles que difieren en magnitud (potencia de adición periférica), forma y distribución. Los perfiles de potencia más utilizados hoy en día son los del lentes multifocales de distancia central Normalmente se utiliza para la corrección de la presbicia, sobre todo si la adición es de 2,50D o superior.
También puede utilizar la función Lentes EDOF conseguir una ampliación de la profundidad de foco (EDOF) manipulando las aberraciones.
Otras opciones son lentes de doble enfoquecon uno o varios anillos concéntricos y, además, el cambio frecuente de lentes pueden fabricarse a medida, adaptando el diámetro del anillo miópico y su potencia a las características refractivas y de desarrollo miópico de los pacientes pequeños. Con este enfoque, también se podrían conseguir buenos resultados en casos que, con lentes desechables estandarizadas, se clasifican como no respondedores al tratamiento o con un crecimiento muy rápido del bulbo.
Calidad de visión
Todos estos tipos de LAC inducen necesariamente, además del desenfoque miópico periférico, un borrosidad en la retina central. Este desenfoque puede afectar negativamente a la visión.
Según diversos datos de investigaciones científicas, las lentes periféricas de desenfoque miópico son en general bien toleradas por el niños de hasta 12 años, mientras que los adolescentes de entre 13 y 17 años se mostraron más críticos con la calidad visual asociada a estos LAC.
Teniendo en cuenta todo esto, los dos Estudios de cohortes BLINK (Lentes bifocales en niños miopes) en el que se evaluó específicamente el efecto en términos de control de la miopía del retraso en el crecimiento de la longitud del globo ocular inducido por el uso de lentes de contacto blandas multifocales y se comprobó la hipótesis de que los beneficios en términos de reducción de la progresión de la miopía persisten cuando se interrumpe el tratamiento.
En el estudio BLINK2 participaron 235 pacientes jóvenes con miopía, de edades comprendidas entre los 11 y los 17 años, 146 mujeres (59%) y 102 hombres (41%), que completaron el estudio BLINK1, en el que se les asignó aleatoriamente el uso de lentes de contacto multifocales o monofocales durante 3 años. En BLINK2, todos los sujetos llevaron lentes multifocales de alto grado (+2,50 dioptrías) y cambiaron a lentes monofocales en el tercer año para comprobar si se producía un efecto rebote. En BLINK 1 se observó una ligera progresión de la miopía de 0,17D al año, independientemente del grupo de tratamiento, pero en promedio la longitud axial aumentó en consonancia con la tasa de crecimiento fisiológico, sin pérdida del beneficio adquirido.
En Italia, los oftalmólogos pediátricos tienen en general una actitud favorable hacia el uso de LAC en niños miopes, que, sin embargo, sólo se utilizan de forma muy limitada hasta la fecha.
Por lo tanto, es de esperar que los oftalmólogos pediátricos, en particular, se familiaricen cada vez más con estas opciones de tratamiento y con los ensayos clínicos pertinentes, ya que es precisamente laoftalmólogo pediátrico el interlocutor en el que más confían los padres a la hora de valorar el mejor tratamiento para la salud ocular de sus hijos.
En el ámbito de la oftalmología pediátrica, véase también
- La "salud digital" de niños y jóvenes - Oculista Italiano
- Directrices de la OMS: reducir la exposición de los niños a las pantallas digitales
- Dolor ocular en los niños: un síntoma que no hay que subestimar
- Berntsen DA, Ticak A, Orr DJ, et al; Grupo de estudio de lentes bifocales en niños miopes (BLINK). Crecimiento axial y progresión de la miopía después de interrumpir el uso de lentes de contacto multifocales blandas. JAMA Ophthalmol. 2025 Feb 1;143(2):155-162. doi: 10.1001/jamaophthalmol.2024.5885
- Kido A, Miyake M, Watanabe N. Intervenciones para aumentar el tiempo pasado al aire libre para prevenir la incidencia y la progresión de la miopía en niños (Revisión Cochrane traducida). Cochrane Database Syst Rev. 2024 Jun 12;6(6):CD013549. doi: 10.1002/14651858.CD013549
- Liang J, Pu Y, Chen J, Liu M, et al. Global prevalence, trend and projection of myopia in children and adolescents from 1990 to 2050: a comprehensive systematic review and meta-analysis. Br J Ophthalmol. 2025 Feb 24;109(3):362-371. doi: 10.1136/bjo-2024-325427.
- Nixon A, Xu J, Brennan NA, et al. Diferencias subjetivas de visión con lentes de contacto blandas para el control de la miopía en niños y adolescentes. Invest. Ophthalmol. Vis. Sci. 2023;64(8):4936.