La calidad del sueño nocturno es un elemento fundamental para la bienestar psicofísico del organismo. En efecto, las pérdidas de horas de sueño y, más aún, la mala calidad del sueño, no sólo tienen graves repercusiones en la calidad de vida y la salud del individuo, sino que también están relacionadas con determinadas patologías, entre ellas las enfermedades oculares, tales como síndrome del ojo seco (DED- enfermedad del ojo seco https://www.oculistaitaliano.it/articoli/focus-sul-dry-eye/) que a su vez está relacionado con el ciclo circadiano, es decir, el ritmo sueño-vigilia.
En general, los trastornos del sueño están relacionados con una mayor tasa de mortalidad, más accidentes de tráfico y una pérdida de concentración en la realización de las actividades cotidianas. Las condiciones patológicas o clínicas más frecuentemente asociadas a una mala calidad del sueño incluyen:
-Diabetes
-Hipertensión
-Obesidad
-Trastornos psíquicos
-Depresión
-Envejecer
-Menopausia
-Ansiedad
-DED
Con respecto a esta última patología, en los últimos años muchos investigadores han centrado sus investigaciones en el tratamiento de los trastornos del sueño, así como en todo el perfil psicológico del sujeto como parte del tratamiento de la DED. Esto se debe a que diversas evidencias clínicas han demostrado que Tratar el perfil mental del paciente con DED, por ejemplo en el caso de personas que sufren ansiedad o depresión, puede ayudar a mejorar la calidad del sueño.
¿Cuál es la relación entre la DED y el sueño?
El aparato visual desempeña un papel fundamental en el ciclo sueño-vigilia. De hecho, ciertas células nerviosas intrínsecamente fotosensibles de la retina (células ganglionares), junto con la melanopsina (proteína de la retina), desempeñan un papel crucial en el control del reloj circadiano. En presencia de patologías oculares, como la DED, el glaucoma o las cataratas, la fotorrecepción retiniana y la transmisión de la luz absorbida se alteran provocando trastornos en el ritmo sueño-vigilia y, por tanto, en la calidad del sueño. Estas afirmaciones se confirman además en una encuesta realizada a 1.000 sujetos, 18% de los cuales padecían DED y algo menos de la mitad se quejaban de trastornos relacionados con el sueño, así como de una mayor susceptibilidad a la ansiedad y los estados depresivos.
Otras investigaciones realizadas en los ojos y la película lagrimal de pacientes con DED sugirieron que presentan más procesos inflamatorios durante el sueño que los sujetos sanos. De hecho, los sujetos con Los DED tienen una mayor prevalencia de apnea obstructiva del sueño.
En conclusión, los trastornos del sueño, así como la DED, son cuestiones cada vez más importantes en la actualidad, ya que están estrechamente relacionados con algunos factores de riesgo comunes, como el estrés o el uso excesivo de dispositivos digitales. Por lo tanto, según algunos investigadores, los oftalmólogos deberían tener en cuenta que algunos pacientes con DED también pueden sufrir trastornos del sueño, lo que agrava aún más el estado mental y físico del sujeto. Por lo tanto, un enfoque multidisciplinar e interdisciplinar, incluida la consulta con oftalmólogos, Médicos expertos en trastornos del sueño y psicoterapeutas podría ser un enfoque válido para el tratamiento del paciente que padece el síndrome del ojo seco.
Fuente
Ayaki M et al. Sleep Disorders are a Prevalent and Serious Comorbidity in Dry Eye. Invest Ophthalmol Vis Sci. 2018;59(14): DES143-DES150
Dr. Carmelo Chines
Director responsable