Actualización del ácido hialurónico

El ácido hialurónico es una molécula que se utiliza desde hace muchos años como lubricante ocular por sus especiales características.

L'ácido hialurónico es un polisacárido polianiónico de alto peso molecular con una típica estructura en espiral que le confiere una especial capacidad para combinarse con el agua1 y una excelente viscoelasticidad.

El resultado es un capacidad hidratante y un pronunciado comportamiento pseudoplásticosimilar a la de las mucinas solubles de la película lagrimal.

Significado de pseudoplástico

En mecánica de fluidos, se dice "pseudoplástico" de los fluidos no newtonianos en los que el coeficiente de viscosidad disminuye a medida que aumenta el esfuerzo cortante.

En el caso del ácido hialurónico contenido en los colirios, "pseudoplástico" significa que tiene una viscosidad mayor cuando el ojo está abierto y menor durante el parpadeo, lo que permite la lubricación de toda la superficie ocular.

Propiedades

La propiedades La capacidad del ácido hialurónico para ligar grandes cantidades de agua y su capacidad para imitar el comportamiento de las mucinas contribuyen a mantener la estabilidad de la película lagrimal (3) y garantizan una protección y lubricación ocular óptimas. Además de estas propiedades particulares, el ácido hialurónico también desempeña un importante papel biológico en los procesos de reparación corneal (4), favoreciendo la motilidad celular, la adhesión y la proliferación.

Estudios recientes también han demostrado que estas características se complementan con la capacidad del ácido hialurónico para limitar los efectos perjudiciales sobre la superficie ocular debidos al uso crónico de productos oftálmicos que contienen cloruro de benzalconio (BAC) (5).

Ácido hialurónico para uso oftálmico

Cloruro de benzalconio

En Cloruro de benzalconio es un compuesto de amonio cuaternario con propiedades limpiadoras, comúnmente utilizado en preparados oftálmicos como conservante por su alto poder antimicrobiano e alta estabilidad.

Sin embargo, el uso crónico de productos conservados con CAV puede alterar la integridad de las membranas lipídicas celulares del epitelio corneal debido a su naturaleza catiónica6. La interacción del CAV con las membranas celulares también puede conducir a un aumento del trifosfato de adenosina (ATP) extracelular, que es altamente afín a los receptores P2X75.

Estos últimos forman parte de una familia de receptores transmembrana compuestos por subunidades cuya agregación forma canales iónicos que median la entrada de cationes de bajo peso molecular, como el sodio y el calcio, en la célula y la salida del potasio. El receptor P2X7 reconoce varios nucleótidos como ligandos y se activa principalmente por el nucleótido ATP. La activación de este receptor por altas concentraciones de ATP conduce a la formación de poros citolíticos y a una serie de acontecimientos intracelulares que culminan en la apoptosis celular (7,8,9).

Acción protectora del ácido hialurónico sobre la superficie ocular durante el tratamiento crónico con productos oftálmicos que contienen BAC. se ha atribuido a dos mecanismos diferentes.

Un mecanismo directo (Fig. 1), por el que el ácido hialurónico es capaz de neutralizar la carga positiva del BAC gracias a sus numerosas cargas negativas5,10, y a un mecanismo indirecto (Fig. 2), por el que el ácido hialurónico se une a sus receptores específicos CD44, máscaras de los receptores P2X7cuya activación se ve favorecida por la CAV. Por lo tanto, esto no permite que se desencadenen los acontecimientos intracelulares que conducen a la apoptosis celular (5,7,8,9).

Ojo seco tras cirugía de cataratas

La catarata senil es una enfermedad ocular relacionada con la edad para la que el tratamiento de elección es la facoemulsificación combinada con la implantación de lentes intraoculares. Las enfermedades de la superficie ocular son frecuentes tras la cirugía de cataratas y pueden repercutir negativamente en la calidad de vida de los pacientes. Además, el uso de colirios antiinflamatorios antes de la cirugía de cataratas a menudo puede causar daños en el epitelio y, posteriormente, la alteración de la película lagrimal debida a la cirugía puede provocar un aumento de los factores inflamatorios locales. Por último, la incisión corneal provoca daños en las células epiteliales de la córnea y la anestesia local también puede causar molestias en la superficie ocular tras la cirugía.

Todos estos factores se encuentran entre las causas que contribuyen a la aparición del ojo seco tras la cirugía de cataratas. Además, con la edad, tanto la catarata como el síndrome del ojo seco (que es la enfermedad más frecuente de la superficie ocular) tienen una mayor incidencia. Para reducir las molestias de los pacientes, es importante encontrar tratamientos adecuados que disminuyan el impacto de la cirugía de cataratas en la superficie ocular.

Entre las sustancias más interesantes a este respecto se encuentra el hialuronato sódicoes la sal sódica del ácido hialurónico, una molécula capaz de retener agua en la superficie ocular y retardar la evaporación de la película lagrimal. En un estudio reciente se investigaron los cambios de la superficie ocular tras la facoemulsificación en pacientes con cataratas asociadas a la edad tras la adición de gotas con concentraciones variables de hialuronato sódico.

Realización y diseño del estudio

Nello estudioLos autores examinaron la eficacia de los colirios de hialuronato sódico 0,3% y 0,1% para restablecer la regularidad de la superficie corneal en pacientes que desarrollaron síndrome de ojo seco tras cirugía de cataratas. Las gotas se administraron por vía tópica cuatro veces al día a 73 pacientes, divididos en tres grupos: en el grupo A, 30 pacientes recibieron terapia convencional y gotas oftálmicas de hialuronato sódico 0,3%; en el grupo B, 31 pacientes recibieron terapia convencional y gotas oftálmicas de hialuronato sódico 0,1%; en el grupo C, sólo se administró terapia convencional a 30 pacientes. El tratamiento postoperatorio convencional incluyó colirios con levofloxacino y tobramicina dexametasona, ambos administrados cuatro veces al día, y colirios con bromfenaco sódico, administrados dos veces al día. Las evaluaciones se realizaron a intervalos específicos hasta 3 meses después de la operación e incluyeron evaluaciones de la estabilidad y la irregularidad de la película lagrimal.

A continuación, se examinó a los pacientes siete días, dos semanas, un mes y dos meses después de la cirugía y se observaron diferencias significativas en los valores de la prueba de Schirmer I, la altura del menisco de la película lagrimal y el tiempo de ruptura de la película lagrimal en ambos grupos tratados con hialuronato sódico, en comparación con los controles. Además, la concentración de 0,3% dio aún mejores resultados dos meses después de la cirugía. Los valores de irregularidad corneal también disminuyeron de forma más significativa en el grupo tratado con hialuronato sódico 0,3%, en comparación con el grupo tratado con hialuronato sódico 0,1% y el grupo de control.

¿Cuáles son las implicaciones del estudio para la práctica clínica?

En general, el estudio demostró que el hialuronato sódico es capaz de restaurar la estructura de la película lagrimal y la regularidad de la superficie corneal, y que la concentración de 0,3% es más eficaz que la de 0,1%. Así pues, en la fase inicial tras la facoemulsificación, en la que se reduce la estabilidad de la película lagrimal, las gotas de hialuronato son una opción excelente para mantener la salud de la superficie ocular.

Los autores afirman que serán necesarios más estudios prospectivos y comparativos que incluyan resultados comunicados por los pacientes para establecer con mayor certeza el papel del hialuronato sódico en el tratamiento de los pacientes que desarrollan la enfermedad del ojo seco tras la cirugía de cataratas. Sin embargo, a la espera de dicha confirmación, las gotas oftálmicas de hialuronato sódico pueden considerarse una opción terapéutica útil para los pacientes con síntomas de ojo seco tras la cirugía de cataratas.

 

Dr. Carmelo Chines
Director responsable

Bibliografía
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  • 4. Camillieri G. et al, Hyaluronan-induced stimulation of corneal wound healing is a pure pharmacological effect. J Ocular Pharm Ther 2004;20(6):548-553.
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  • 8. Dutot M. et al, Effects of toxic cellular stresses and divalent cations on the human P2X7 cell death receptor. Mol Vis. 2008;14:889-897.
  • 9. Adinolfi E. et al., Basal activation of the P2X7 ATP receptor elevates mitochondrial calcium and potential, increases cellular ATP levels, and promotes serum-independent growth. Mol Biol Cell 2005;16:3260-3272.
  • 10. Debbasch C. et al, Cytoprotective effects of Hyaluronic Acid and Carbomer 934P in Ocular Surface Epithelial Cells. Invest Ophthalmol Vis Sci. 2002;43:3409-3415.

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